viernes, 2 de julio de 2010

Cerrado por vacaciones


Hasta finales de agosto echo el cierre, mis vacaciones no son tan largas, pero en verano resulta complicado quedarse en casa escribiendo. El calor debilita la disciplina, diluye la tinta y dispersa las ideas (cuando no las cuece). Con tanta luz y durante tantas horas es inevitable distraerse, cualquier esfuerzo que implique sentarse delante de un ordenador para escribir es ir contracorriente de los propios deseos, así que en uno de mis escasos gestos de sabiduría acepto, sin presentar contienda, la inevitable derrota.

Espero que todos tengáis un buen verano, seáis felices y si las circunstancias no acompañan, esperaremos al otoño, quizá con el cambio de estación las cosas mejoren algo, o como mínimo, habrá menos horas de luz para poder verlas. Mucha suerte a todos y tened cuidado ahí fuera, que en septiembre se pasa lista.